La primavera ha llegado para confundir los síntomas entre la alergia estacional y el COVID-19. Por eso es muy importante recordar si durante esta época del año presentamos o no síntomas alérgicos.

En su forma típica, la alergia estacional puede producir tos en algunos pacientes, mientras que con COVID-19 la tos es intensa en un gran número de pacientes, al igual que la fiebre.

La disnea -o dificultad para respirar- aparece en el 30% de los casos con COVID-19 positivo. En cambio con la alergia, la disnea es esporádica y suele aparecer en las noches.

Con alergia, la congestión nasal es intermitente y puede aparecer picazón nasal y ocular. Con COVID-19 en cambio, no hay estornudos y puede producirse pérdida la pérdida del olfato y del gusto.

Durante un episodio alérgico también se puede presentar falta de energía y decaimiento. Con COVID-19, a estos síntomas se le suma el dolor muscular, dolor de cabeza constante, y en algunos casos puede provocar diarrea.

Pero, ¿cuándo se debe acudir al servicio de Urgencias? El Dr. Jorge Ibáñez, jefe técnico de la Urgencia de la Posta Central, señaló que cuando los síntomas son leves o como una simple gripe, y pueden ceder con algún medicamento, es recomendable ir a los centros de Atención Primaria correspondientes. Sin embargo, si los síntomas no ceden, hay fiebre que no baja, y hay dificultad respiratoria importante, hay que acudir a un hospital para evaluar si se trata de un cuadro de rinitis estacional o un caso complejo de COVID-19”.

Estas son algunas recomendaciones para cuidar de tu salud durante esta primavera y verano.