Odontólogos HUAP atienden pacientes en zonas aisladas para reducir listas de espera
Dos cirujanos maxilofaciales de la Posta Central viajaron en comisión de servicio a Isla de Pascua, Talca y Molina, donde contribuyeron en la atención de más de 100 personas que necesitaban intervenciones dentales.
Con el objetivo de reducir las listas de espera en el país, dos dentistas del Hospital de Urgencia Asistencia Pública (HUAP) participaron de comisiones de servicio en terreno para atender a pacientes en zonas rurales y aisladas.
Se trata de Patricio Hernández y Víctor Sanhueza, cirujanos maxilofaciales de la Urgencia Dental de la Posta Central que realizaron procedimientos dentales en Isla de Pascua, en la Región de Valparaíso y en comunas de la Región del Maule.
Hernández viajó hasta Hanga Roa junto a una comitiva de odontólogos movilizados por la ONG Sonríe Siempre Fernando Mora, y en el transcurso de una semana, contribuyó en la atención de 80 pacientes, la mayoría de ellos a la espera de la extracción de terceros molares.
Sobre los habitantes de la ciudad, el Dr. Hernández indicó que «si bien tienen operativos de la FACH, tienen ayuda, no tienen dónde más ir. Es difícil que los pacientes vengan a resolver sus problemas de salud al continente, por eso se hizo este operativo».
Por su parte, el Dr. Sanhueza viajó como parte de una comisión de servicio del Ministerio de Salud a las ciudades de Molina y Talca. Allí, atendió a 27 pacientes que estaban en lista de espera para la extracción de terceros molares.
«Eran casos bien difíciles, que habían sido postergados por la complejidad de los procedimientos», indicó al respecto el Dr. Sanhueza.
«Da una gratificación personal el poder contribuir con todo lo que he estudiado y ponerlo al servicio de la comunidad. Hay gente que necesita mucho esto, ha sido muy postergada porque no hay la suficiente dotación de especialistas en sectores rurales», agregó el especialista.
En ese sentido, el Dr. Hernández señaló que «uno está acostumbrado a realizar terceros molares acá, lo hace frecuentemente y sin tantas limitaciones. Llevar eso a lugares lejanos donde no hay muchas condiciones o tanta infraestructura, lo pone a prueba a uno».
«Eso es gratificante, para ponerle exigencias a nuestro quehacer y ayudar a la gente», reflexionó Hernández.